En uno de los giros más dramáticos del Giro de Italia 2025, la sensación mexicana Isaac del Toro perdió la codiciada Maglia Rosa durante la crucial Etapa 20 del sábado, ante un resurgido Simon Yates del equipo Visma | Lease a Bike. Pero lejos de sentirse derrotado, Del Toro pronunció una poderosa declaración en la línea de meta que ya ha hecho eco en todo el pelotón: “Esto es solo el comienzo. Voy a recuperar mi título.”
El joven corredor del UAE Team Emirates había llevado el maillot de líder con aplomo y fuerza durante toda la carrera, pero la etapa reina del sábado resultó ser un punto de quiebre. Yates lanzó un devastador ataque en solitario en los últimos ascensos, con el respaldo previo de Wout van Aert, arrebatándole más de cuatro minutos a Del Toro y tomando el liderato general de cara al último día en Roma.
Muchos esperaban ver a Del Toro abatido, tal vez incluso roto por la pérdida. En cambio, el joven de 20 años se mantuvo firme. “Esta no es el final de mi historia en el Giro,” dijo a los periodistas después de cruzar la meta. “A veces, hay que perder para aprender. El próximo año, o quizás antes, volveré más fuerte que nunca.”
Sus palabras reflejan la confianza y madurez que se han convertido en su sello en esta temporada de consagración. Mientras Yates celebraba su victoria de etapa y la recuperación del maillot rosa, el optimismo desafiante de Del Toro ofrecía otro tipo de titular: uno de resiliencia, juventud y hambre de redención.
Tanto compañeros de equipo como rivales tomaron nota de su actitud. “Es un luchador,” dijo João Almeida, compañero de equipo de Del Toro. “No hay duda de que tiene las piernas y la mentalidad para ganar una gran vuelta. Esto es solo el inicio de algo grande para él.”
La pérdida de Del Toro fue tanto un cambio táctico como físico. El UAE tuvo dificultades para controlar la escapada en los tramos finales, y el movimiento perfectamente cronometrado de Visma con Van Aert y Yates dividió por completo la carrera. Aun así, el prodigio mexicano nunca se quebró; luchó hasta el final, minimizando el daño tanto como pudo.
El mundo del ciclismo respondió rápidamente a su promesa. Las redes sociales se llenaron de mensajes de apoyo, con fanáticos elogiándolo no solo por su valentía en la carretera, sino también por su deportividad fuera de ella. Muchos trazaron paralelismos con otros grandes campeones que sufrieron derrotas antes de alcanzar la gloria—Evans, Nibali, incluso Pogacar.
Con el Giro entrando en su etapa final, mayormente ceremonial, en Roma, Del Toro se ubica segundo en la clasificación general—una posición notable para un corredor en su primera temporada completa en la élite. Aunque el maillot rosa ahora pertenece a Yates, la chispa encendida en los ojos de Del Toro podría ser aún más significativa.
“Este Giro me dio confianza,” concluyó Del Toro. “Ahora sé que pertenezco aquí. Y créanme: voy a volver. Y la próxima vez, no lo voy a soltar.”
Con talento, juventud y la voluntad de luchar de su lado, pocos en el mundo del ciclismo dudan que el viaje de Isaac del Toro está lejos de terminar. De hecho, como él mismo lo dijo con tanta seguridad, esto puede ser realmente solo el comienzo.